Taller Para Prevención del Sida Para Hombres Latinos by Jacobo Schifter - HTML preview

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Ejercicio contra el resentimiento

Busque un lugar tranquilo en donde pueda descansar, siéntese en una sil a confortable y relaje sus brazos y las piernas y cierre los ojos.

Ahora, vamos a hacer un ejercicio mental para liberarnos de los resentimientos y lo vamos hacer imaginándonos, en primer lugar, con los ojos de nuestra mente a esa persona que usted le tiene resentimiento: mírela con los ojos de su mente, obsérvela detal adamente, no pierda detal e.

Ahora piense en lo que esa persona le ha hecho o dicho que lo ha herido.

Luego, piense que esta persona recibe todas esas cosas que usted siempre ha deseado tener: amor, dinero, éxito, reconocimiento social, poder, todas esas y otras cosas que podrían ser importantes para usted.

Analice ahora sus reacciones: si le es difícil imaginarse que esta persona que usted no quiere recibe todo eso que usted puede desear, trátelo de volver a imaginárselo; fíjese que es más fácil si lo vuelve a intentar. Piense nuevamente que esa persona recibe todo lo que usted desearía tener.

Analice sus reacciones, piense qué es lo que siente ahora: ¿cólera?

¿Enojo?, ¿tristeza? ¿Depresión? ¿Indiferencia? Fíjese muy bien en lo que usted le pasa cuando le desea cosas buenas a esa persona.

Ahora póngase en el lugar de la otra persona cuando sucedió el pleito o la ruptura, trate de entender la actitud de su enemigo u opositor.

Piense por qué hizo lo que hizo, qué objetivos tenía, qué la motivo a actuar como lo hizo.

Fíjese que después de haberlo pensado así, usted se siente más relajado y con menos resentimientos. La verdad es que el resentimiento ha sido una carga para usted hasta ahora; lo mejor es quizás perdonar a esta persona y sacar de una vez por todas hacia afuera esa presión que ha sentido.

Sienta el alivio de nuevo por haber perdonado, haya usted tenido o no la culpa, y tampoco importa ya las razones de las acciones, lo único que importa es relajarse, deshacerse de esas presas en el alma, de sacar esos resentimientos hacia afuera.

Disfrute ahora por unos momentos de ese sentimiento de libertad.

Empiece ahora a tomar conciencia del cuarto en donde se encuentra, estire los brazos, las piernas, siéntase relajado, optimista, regenerado y cuando sienta que es el tiempo adecuado, abra los ojos.

Sesión 6