Las personas que tienen problemas en establecer relaciones íntimas y que delegan el control en los demás, es probable que sean más propensas a tener problemas en establecer relaciones abiertas, claras, en las que la comunicación sexual sea satisfactoria, y en donde las decisiones del uso del preservativo y la práctica del sexo más seguro sean compartidas.
Aquel os que están acostumbrados a complacer para ser aceptados, tiene seguramente problemas en exigir el sexo más seguro. Individuos con problemas de codependencia, tienen mayores miedos a establecer relaciones emocionales con otros y a incurrir en prácticas sexuales más numerosos y posiblemente, peligrosas.
Es importante, entonces, trabajar el área de codependencia y su antídoto, la intimidad, como parte de un programa de prevención del Sida. Los participantes deben analizar sus patrones de conducta con los demás, su capacidad para establecer relaciones con personas con las que puedan desarrol ar la intimidad necesaria para negociar una vida sexual más segura. Además, ayudar a alejarlos de las relaciones con individuos alcohólicos o narcodependientes en las que el sexo inseguro puede ser común.
Ejercicios de esta sección
Los ejercicios de esta sección intentan hacer conciencia de los patrones de codependencia, las razones de su origen y las alternativas para trabajar con el as.
La codependencia, igual que el alcoholismo, es una enfermedad de la negación. Quienes la sufren tienden a creer que su conducta es muy adecuada y que su dependencia es una demostración de amor. Suelen pensar que el a forma parte de las demandas de toda relación. De ahí que sea importante terminar con la negación por medio de tareas específicas en que los participantes identifiquen sus conductas. Una vez que se reconoce el patrón, las alternativas que se dan deben relacionarse con aumentar la autoestima, la capacidad de establecer intimidad y la capacidad de erigir fronteras.