Reina Valera NuevoTestamento de la Palabra de Dios (Edición Publicada en 1858) by Anonymous Author - HTML preview

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34 ¡Jerusalem, Jerusalem! que matas los profetas, y apedreas los que sonenviados á tí, ¿cuántas veces quise juntar tus hijos, como el ave sus pollosdebajo de sus alas, y no quisiste?

35 Hé aquí, os es dejada vuestra casa desierta: y os digo, que no me vereis,hasta que venga [tiempo] cuando digais: Bendito, el que viene en nombre delSeñor.

CAPITULO 14

1 Y ACONTECIÓ que entrando en casa de un príncipe de los Fariséos un sábadoá comer pan, ellos le acechaban.

2 Y hé aquí, un hombre hidrópico estaba delante de él.

3 Y respondiendo Jesus, dijo á los doctores de la ley, y á los Fariséos,diciendo: ¿Es lícito sanar en sábado?

4 Y ellos callaron. Entonces él tomándole, le sanó, y le envió.

5 Y respondiendo á ellos, dijo ¿El asno ó el buey de cuál de vosotros caeráen [algun] pozo, y [él] no le sacará luego en dia de sábado?

6 Y no le podian replicar á estas cosas.

7 Y dijo una parábola á los convidados, atento como escogian los primeros asientos á la mesa, diciéndoles:

8 Cuando fueres convidado de alguno á bodas, no te asientes en el primer lugar: porque podrá ser que otro mas honrado que tú sea convidado de él; 9 y viniendo el que te llamó á tí y á él, te diga: Da lugar á este; y entonces comiences con vergüenza á tener el postrer lugar.

10 Mas cuando fueres llamado, vé, asiéntate en el postrer lugar; porquecuando viniere el que te llamó, te diga: Amigo, sube arriba: entonces tendrásgloria delante de los que juntamente se asientan á la mesa.

11 Porque cualquiera que se ensalza, será humillado; y el que se humillaserá ensalzado.

12 Y decia tambien al que le habia convidado: Cuando haces comida ó cena, nollamas á tus amigos, ni á tus hermanos, ni á tus parientes, ni á tus vecinosricos: porque tambien ellos no te vuelvan á convidar, y te sea hecha paga.

13 Mas cuando haces banquete, llama á los pobres, los mancos, los cojos, los ciegos;

14 y serás bienaventurado: porque no te pueden pagar: mas te será pagado en la resurreccion de los justos.

15 Y oyendo esto uno de los que juntamente estaban sentados á la mesa, le dijo: Bienaventurado el que comerá pan en el reino de los cielos.

16 El entonces le dijo: Un hombre hizo una grande cena, y llamó á muchos.

17 Y á la hora de la cena envió á su siervo á decir á los convidados: Venid,que ya todo está aparejado.

18 Y comenzaron todos á una á excusarse. El primero le dijo: He comprado uncortijo, y he menester de salir, y verle: te ruego que me tengas porexcusado.

19 Y el otro dijo: He comprado cinco yuntas de bueyes, y voy á probarlos; teruego que me tengas por excusado.

20 Y el otro dijo: Me he casado; y por tanto no puedo venir.

21 Y vuelto el siervo, hizo saber estas cosas á su señor. Entonces el padrede la familia, enojado dijo su siervo: Vé presto por las plazas, y por lascalles de la ciudad, y mete acá los pobres, los mancos, y cojos, y ciegos.

22 Y dijo el siervo: Señor, hecho es como mandaste, y aun hay lugar.

23 Y dijo el señor al siervo: Vé por los caminos, y por los vallados, y fuerzalos á entrar, para que se llene mi casa;

24 porque [yo] os digo, que ninguno de aquellos varones que fueron llamados, gustará mi cena.

25 Y MUCHAS compañías iban con él; y volviéndose les dijo: 26 Si alguno viene á mí, y no aborrece á su padre, y madre, y mujer, éhijos, y hermanos, y hermanas, y aun tambien su vida, no puede ser midiscípulo.

27 Y cualquiera que no trae su cruz, y viene en pos de mi, no puede ser mi discípulo.

28 Porque ¿cuál de vosotros, queriendo edificar una torre, no cuenta primero sentado los gastos, si tiene [lo que ha menester] para acabar[la?]

29 Porque despues que haya puesto el fundamento, y no pueda acabarla, todos los que lo vieren, no comiencen á hacer burla de él,

30 diciendo: Este hombre comenzó á edificar, y no pudo acabar.

31 ¿O cuál rey, habiendo de ir á hacer guerra contra otro rey, sentándoseprimero no consulta si puede salir al encuentro con diez mil al que vienecontra él con veinte mil?

32 De otra manera, cuando aun el otro está lejos, le ruega por la paz, enviándole embajada.

33 Así pues cualquiera de vosotros que no renuncia á todas las cosas que posee, no puede ser mi discípulo.

34 Buena es la sal: mas si la sal fuere desvanecida, ¿con qué se adobará?

35 Ni para la tierra, ni para el muladar es buena: en la calle la echan.Quien tiene oidos para oir, oiga.

CAPITULO 15

1 SE llegaban á él todos los publicanos, y pecadores á oirle.

2 Y murmuraban los Fariséos y los escribas, diciendo: Este á los pecadoresrecibe, y con ellos come.

3 Y él les dice esta parábola, diciendo:

4 ¿Qué hombre de vosotros, teniendo cien ovejas, si perdiere una de ellas,no deja las noventa y nueve en el desierto, y va á la que se perdió, hastaque la halle?

5 Y hallada, [la] pone sobre sus hombros gozoso;

6 y viniendo á casa, junta á los amigos, y á los vecinos, diciéndoles: Dadme el parabien: porque he hallado mi oveja que se habia perdido.

7 Os digo, que así habrá gozo en el cielo de un pecador que se enmienda,

[mas que] de noventa y nueve justos, que no han menester enmendarse.

8 ¿O qué mujer que tiene diez dracmas, si perdiere la una dracma, noenciende el candil, y barre la casa, y busca con diligencia, hastahallar[la?]

9 Y cuando [la] hubiere hallado, junta las amigas, y las vecinas, diciendo: Dadme el parabien: porque he hallado la dracma que habia perdido.

10 Así os digo, que hay gozo en los ángeles de Dios de un pecador que se enmienda.

11 Tambien dice: Un hombre tenia dos hijos;

12 y el mas mozo de ellos dijo á su padre: Padre, dáme la parte de lahacienda que [me] pertenece. Y [él] les repartió la hacienda.

13 Y despues de no muchos dias, juntándolo todo el hijo mas mozo, se partiólejos, á una provincia apartada; y allí desperdició su hacienda viviendoperdidamente.

14 Y despues que lo hubo todo desperdiciado, vino una grande hambre en aquella provincia; y comenzóle á faltar.

15 Y fué, y se llegó á uno de los ciudadanos de aquella tierra, el cual le envió á su cortijo, para que apacentase los puercos.

16 Y deseaba henchir su vientre de las mondaduras que comian los puercos; mas nadie se [las] daba.

17 Y volviendo en sí, dijo: ¡Cuántos jornaleros en casa de mi padre tienen abundancia de pan, y yo aquí perezco de hambre!

18 me levantaré, é iré á mi padre, y le diré: Padre, he pecado contra el cielo, y contra tí:

19 ya no soy digno de ser llamado tu hijo: hazme como á uno de tus jornaleros.

20 Y levantándose, vino á su padre. Y como aun estuviese lejos, le vió supadre, y fué movido á misericordia; y corriendo á él, se derribó sobre sucuello, y le besó.

21 Y el hijo le dijo: Padre, he pecado contra el cielo, y contra tí: ya no soy digno de ser llamado tu hijo.

22 Mas el padre dijo á sus siervos: Sacad el principal vestido, y vestidle; y poned anillo en su mano, y zapatos en sus piés;

23 y traed el becerro grueso, y matadle; y comamos, y hagamos banquete: 24 porque este mi hijo muerto era, y ha revivido: se habia perdido, y es hallado. Y comenzaron á hacer banquete.

25 Y su hijo el mas viejo estaba en el campo, el cual como vino, y llegó cerca de casa, oyó la sinfonía y las danzas;

26 y llamando uno de los siervos, le preguntó qué era aquello.

27 Y él le dijo: Tu hermano es venido; y tu padre ha muerto el becerro grueso, por haberle recibido salvo.

28 Entonces [él] se enojó, y no queria entrar. El padre entonces saliendo, le rogaba [que entrase.]

29 Mas él respondiendo, dijo al padre: Hé aquí, tantos años [ha que te]sirvo, que nunca he traspasado tu mandamiento, y nunca me has dado un cabritopara que haga banquete con mis amigos: 30 mas despues que vino este tu hijo, que ha engullido tu hacienda con rameras, le has matado el becerro grueso.

31 El entonces le dijo: Hijo, tu siempre estás conmigo, y todas mis cosas son tuyas:

32 mas hacer banquete y holgar[nos] era menester: porque este tu hermano muerto era, y revivió: habíase perdido, y es hallado.

CAPITULO 16

1 Y DECIA tambien á sus discípulos: Habia un hombre rico, el cual tenia un mayordomo; y este fué acusado delante de él, como disipador de sus bienes.

2 Y le llamó, y le dice: ¿Qué [es] esto [que] oigo de tí? da cuenta de tu mayordomía: porque ya no podrás mas ser mayordomo.

3 Entonces el mayordomo dijo dentro de sí: ¿Qué haré? que mi señor me quita la mayordomía: cavar, no puedo: mendigar, tengo vergüenza: 4 [yo] se lo que haré, para que cuando fuere quitado de la mayordomía, me reciban en sus casas.

5 Y llamando á cada uno de los deudores de su señor, dijo al primero:

¿Cuánto debes á mi señor?

6 Y él dijo: Cien batos de aceite. Y le dijo: Toma tu obligacion, y siéntate presto, y escribe cincuenta.

7 Después dijo á otro: ¿Y tú, cuánto debes? Y él dijo: Cien coros de trigo.

Y él le dijo: Toma tu obligacion, y escribe ochenta.

8 Y alabó el señor al mayordomo malo, por haber hecho prudentemente: porque los hijos de este siglo mas prudentes son que los hijos de luz en su género.

9 Y yo os digo: Hacéos amigos de las riquezas de maldad, para que cuando faltáreis, seais recibidos en las moradas eternas.

10 El que es fiel en lo muy poco, tambien en lo mas es fiel; y el que en lo muy poco es injusto, tambien en lo mas es injusto.

11 Pues si en las malas riquezas no fuisteis fieles, ¿lo que es verdadero, quién os lo confiará?

12 Y si en lo ajeno no fuisteis fieles, ¿lo que es vuestro, quién os lo dará?

13 Ningun siervo puede servir á dos señores: porque, ó aborrecerá al uno yamará al otro, ó se allegará al uno, y menospreciará al otro. No podeisservir á Dios, y á las riquezas.

14 Y oían tambien los Fariséos todas estas cosas, los cuales eran avaros; yburlaban de él.

15 Y les dice: Vosotros sois los que os justificais á vosotros mismosdelante de los hombres: mas Dios conoce vuestros corazones: porque lo que loshombres tienen por sublime, delante de Dios es abominacion.

16 La ley y los profetas hasta Juan: desde entonces el reino de Dios es anunciado, y quienquiera hace fuerza contra él.

17 Empero mas fácil cosa es perecer el cielo y la tierra, que perderse una tilde de la ley.

18 Cualquiera que envia á su mujer, y se casa con otra, adultera; y el que se casa con la enviada del marido, adultera.

19 Y habia un hombre rico, que se vestia de púrpura y de lino fino, y hacia cada dia banquete espléndidamente.

20 Habia tambien un mendigo llamado Lázaro, el cual estaba echado á la puerta de él, lleno de llagas,

21 y deseando hartarse de las migajas que caian de la mesa del rico y aun los perros venian, y le lamian las llagas.

22 Y aconteció, que murió el mendigo, y fué llevado por los ángeles al seno de Abraham: y murió tambien el rico, y fué sepultado.

23 Y en el infierno, alzando sus ojos, estando en los tormentos, vió á Abraham lejos, y á Lázaro en su seno.

24 Entonces él, dando voces, dijo: Padre Abraham, ten misericordia de mí, yenvia á Lázaro que moje la punta de su dedo en agua, y refresque mi lengua:porque soy atormentado en esta llama.

25 Y le dijo Abraham: Hijo, acuérdate que recibiste tus bienes en tu vida, yLázaro tambien males: mas ahora este es consolado, y tú atormentado:

26 y además de todo esto, una grande sima está confirmada entre nosotros yvosotros, que los que quisieren pasar de aquí á vosotros, no pueden, ni deallá pasar acá.

27 Y dijo: Ruégote^, pues, padre, que le envies á la casa de mi padre: 28 porque tengo cinco hermanos, para que les proteste, porque no venganellos tambien á este lugar de tormento.

29 Y Abraham le dice: A Moisés, y á los profetas tienen, óiganlos.

30 El entonces dijo: No, padre Abraham: mas si alguno fuere á ellos de los muertos, se enmendarán.

31 Mas Abraham le dijo: Si no oyen á Moisés, y á los profetas, tampoco se persuadirán, Si alguno se levantare de los muertos.

CAPITULO 17

1 Y Á sus discípulos dice: Imposible es que no vengan escándalos: mas ¡ay de aquel por quien vienen!

2 Mejor le fuera, si una muela [de un molino] de asno le fuera puesta al cuello, y fuera echado en la mar, que escandalizar uno de estos pequeñitos.

3 Mirad por vosotros. Si pecare contra tí tu hermano, repréndele; y si se arrepintiere, perdónale.

4 Y si siete veces al dia pecare contra tí, y siete veces al dia se volviere á tí, diciendo: Pésame: perdónale.

5 Y dijeron los apóstoles al Señor: Auméntanos la fé.

6 Entonces el Señor dijo: Si tuvieseis fé como un grano de mostaza, direis á este sicomoro: Desarráigate, y plántate en la mar, y os obedeceria.

7 ¿Y cuál de vosotros tiene un siervo que ara, ó apacienta, que vuelto del campo le diga luego: Pasa, siéntate á la mesa?

8 ¿No le dice antes: Adereza que cene, y arremángate, y sírveme hasta que haya comido y bebido; y despues de esto come tú y bebe?

9 ¿Hace gracias al siervo porque hizo lo que le habia sido mandado? Pienso que no.

10 Así tambien vosotros, cuando hubiéreis hecho todo lo que os es mandado, decid: Siervos inútiles somos: porque lo que debiamos de hacer hicimos.

11 Y ACONTECIÓ, que yendo él^ á Jerusalem, pasaba por medio de Samaria, y de Galiléa.

12 Y entrando en una aldea, viniéronle al encuentro [diez] hombres leprosos, los cuales se pararon de lejos;

13 y alzaron la voz, diciendo: Jesus, Maestro, ten misericordia de nosotros.

14 los cuales como él vió, les dijo: Id, mostraos á los sacerdotes. Y

aconteció, que yendo ellos, fueron limpios.

15 Entonces el uno de ellos, como se vió que era limpio, volvió, glorificando á Dios á gran voz.

16 Y se derribó sobre su rostro á sus piés, haciéndole gracias: y este era Samaritano.

17 Y respondiendo Jesus, dijo: ¿No son diez los que fueron limpios? ¿y los nueve, dónde [están?]

18 ¿no hubo quien volviese, y diese gloria á Dios, sino este extranjero?

19 Y le dijo: Levántate, véte: tu fé te ha salvado.

20 Y PREGUNTADO de los Fariséos, cuando habia de venir el reino de Dios, les respondió, y dijo: El reino de Dios no vendrá manifiesto;

21 ni dirán: Héle aquí, ó héle allí: porque, hé aquí, el reino de Dios entre vosotros está.

22 Y dijo á sus discípulos: Tiempo vendrá, cuando deseareis ver uno de los dias del Hijo del hombre, y no le vereis.

23 Y os dirán: Héle aquí, ó héle allí. No vais ni sigais.

24 Porque como el relámpago relampagueando desde una parte que está debajodel cielo resplandece hasta la [otra] que está debajo del cielo, así tambien[será] el Hijo del hombre en su dia: 25 mas primero es menester que padezca mucho, y sea reprobado de esta generacion.

26 Y como fué en los dias de Noé, así tambien será en los dias del Hijo del hombre:

27 comian, bebian, [maridos] tomaban mujeres, y mujeres maridos, hasta el dia que entró Noé en el arca; y vino el diluvio, y destruyó á todos.

28 Asimismo tambien como fué en los dias de Lot: comian, bebian, compraban, vendian, plantaban, edificaban:

29 mas el dia que Lot salió de Sodoma, llovió del cielo fuego y azufre, y destruyó á todos:

30 como esto será el dia que el Hijo del hombre se manifestará.

31 En aquel dia, el que estuviere en el tejado, y sus alhajas en casa, nodescienda á tomarlas; y el que en el campo, asimismo no vuelva atrás.

32 Acordáos de la mujer de Lot.

33 Cualquiera que procurare salvar su vida, la perderá; y cualquiera que la perdiere, la salvará.

34 Os digo, que aquella noche estarán dos en una cama: el uno será tomado, y el otro será dejado.

35 Dos [mujeres] estarán moliendo juntas: la una será tomada, y la otra será dejada.

36 Dos estarán en el campo: el uno será tomado, y el otro será dejado.

37 Y respondiéndole, le dicen: ¿Dónde, Señor? y él les dijo: Donde[estuviere] el cuerpo, allá se juntarán tambien las águilas.

CAPITULO 18

1 Y LES dijo tambien una parábola, que es menester orar siempre, y no cansarse,

2 diciendo: Habia un juez en una ciudad, el cual ni temia á Dios, ni respetaba hombre.

3 Habia tambien en aquella ciudad una viuda, la cual venia á él, diciendo: Defiéndeme de mi adversario.

4 Mas él no quiso por tiempo: mas despues de esto, dijo dentro de sí: Aunque ni temo á Dios, ni tengo respeto á hombre;

5 todavia, porque esta viuda me es molesta, la defenderé, porque al fin no venga y me muela.

6 Y dijo el Señor: Oid lo que dice el mal juez:

7 ¿y Dios no defenderá á sus escogidos que claman á él dia y noche, aunque sea longánimo acerca de ellos?

8 os digo que los defenderá presto: empero el Hijo del hombre, cuando viniere, ¿hallará fé en la tierra?

9 Y dijo tambien á unos, que confiaban de sí como justos, y menospreciaban á los otros, esta parábola:

10 Dos hombres subieron al templo á orar, el uno Fariséo, y el otro publicano.

11 El Fariséo en pié oraba consigo de esta manera: Dios, te hago gracias,que no soy como los otros hombres, ladrones, injustos, adúlteros; ni aun comoeste publicano.

12 Ayuno dos veces en la semana: doy diezmos de todo lo que poseo.

13 Mas el publicano estando lejos, no queria, ni aun alzar los ojos alcielo: mas heria su pecho, diciendo: Dios, sé propicio á mí, pecador.

14 Os digo que este descendió á su casa [mas] justificado que el otro:porque cualquiera que se ensalza, será humillado; y el que se humilla, seráensalzado.

15 Y TRAIAN á él los niños para que los tocase, lo cual viéndolo los discípulos, les reñian.

16 Mas Jesus llamándolos, dijo: Dejad los niños venir á mí, y no los impidais: porque de tales es el reino de Dios:

17 de cierto os digo, que cualquiera que no recibiere el reino de Dios como un niño, no entrará en él.

18 Y LE preguntó un príncipe, diciendo: ¿Maestro bueno, qué haré para poseer la vida eterna?

19 Y Jesus le dijo: ¿Por qué me dices, bueno? ninguno hay bueno sino solo Dios:

20 los mandamientos sabes: No matarás: No adulterarás: No hurtarás: No dirás falso testimonio: Honra á tu padre, y á tu madre.

21 Y él dijo: Todas estas cosas he guardado desde mi juventud.

22 Y Jesus oido esto, le dijo: Aun una cosa te falta: todo lo que tienes,véndelo, y dálo á los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y vén, sígueme.

23 Entonces él, oidas estas cosas, fué muy triste, porque era rico mucho.

24 Y viendo Jesus que se habia entristecido mucho, dijo: ¡Cuán dificultosamente entrarán en el reino de Dios, los que tienen dineros!

25 Porque mas fácil cosa es entrar un cable por un ojo de una aguja, que un rico entrar al reino de Dios.

26 Y los que [lo] oian, dijeron: ¿Y quién podrá ser salvo?

27 Y él les dijo: Lo que es imposible acerca de los hombres, posible es acerca de Dios.

28 Entonces Pedro dijo: Hé aquí, nosotros hemos dejado todas las cosas, y te hemos seguido.

29 Y él les dijo: De cierto os digo, que nadie hay que haya dejado casa, ó padres, ó hermanos, ó mujer, ó hijos, por el reino de Dios, 30 que no haya de recibir mucho mas en este tiempo, y en el siglo venidero la vida eterna.

31 Y JESUS tomando [aparte] los doce, les dijo: Hé aquí, subimos áJerusalem, y serán cumplidas todas las cosas que fueron escritas por losprofetas del Hijo del hombre.

32 Porque será entregado á las gentes, y será escarnecido, é injuriado, y escupido;

33 y despues que le hubieren azotado, le matarán: mas al tercer dia resucitará.

34 Mas ellos nada de estas cosas entendian, y esta palabra les era encubierta; y no entendian lo que se decia.

35 Y ACONTECIÓ, que acercándose él de Jericó, un ciego estaba sentado junto al camino mendigando,

36 el cual como oyó la compañía que pasaba, preguntaba qué era aquello.

37 Y le dijeron, que Jesus Nazareno pasaba.

38 Entonces dió voces, diciendo: Jesus, Hijo de David, ten misericordia de mí.

39 Y los que iban delante, le reñian que callase: mas él clamaba mucho mas: Hijo de David, ten misericordia de mí.

40 Jesus entonces parándose, mandó traerle á sí. Y como él llegó, le preguntó^.

41 diciendo: ¿Qué quieres que te haga? Y él dijo: Señor, que vea.

42 Y Jesus le dijo: Ve: tu fé te ha hecho salvo.

43 Y luego vió, y le seguia, glorificando á Dios: y todo el pueblo como vió[esto,] dió alabanza